lunes, 21 de mayo de 2018

El lado oscuro del despertar espiritual

La espiritualidad consiste en estar cada vez más conectado con el yo y con todo lo que es. Es completamente hermoso y mágico experimentar la unidad y la magia a tu alrededor que trae una conexión espiritual. La pregunta es, sin embargo, ¿cómo llegamos a ese punto? ¿Cómo nos volvemos más espirituales y cuál es el camino que realmente nos gusta?
Hay un lado oscuro en los despertares espirituales y, para ser franco, la mayoría de las veces es desordenado. El camino para descubrir su ser espiritual generalmente es bastante accidentado, lleno de gruesos pozos de lodo, y hay muchos obstáculos. No me sentaré aquí y te mentiré fingiendo que soy un gurú iluminado con una vida perfecta. No te diré que la espiritualidad es perfecta y hermosa todo el tiempo. No es.
La espiritualidad se vuelve hermosa una vez que te das cuenta de que el viaje es lo que haces. Una vez que te aceptas a ti mismo, a los demás y a tus experiencias por quién y qué son.
Volverse más espiritual significa que debe poder verse a usted mismo, a otras personas y a situaciones con poco o ningún prejuicio. La espiritualidad nos enseña a amar a aquellos que más nos han lastimado. Nos enseña a ver las lecciones en cada herida antes de que pueda ser sanada.
Eso no pinta exactamente una imagen perfecta de vibraciones zen, ¿verdad? ¿No se supone que la espiritualidad calma y te hace más feliz?
Mucha gente no sabe esto, pero lo que generalmente desencadena un despertar espiritual es un evento traumático o que cambia la vida. Estas estaciones agitadas en nuestras vidas a menudo nos envían a una espiral, a veces hacia arriba, a veces hacia abajo. Entonces comenzamos a mirar la vida desde una perspectiva diferente y muchas veces esto lleva a un poco de búsqueda del tesoro espiritual.
Comenzamos a buscar respuestas, sabiendo que debe haber una razón para todo lo que está sucediendo. Pueden aparecer nuevas sensaciones, como oír, sentir y ver más. Finalmente, comenzamos a aceptar la idea de que tal vez hay más en esta experiencia que lo que se ve a simple vista. Nuevamente buscamos respuestas.
Cuando comenzamos a despertar, a menudo nos sentimos completamente desconectados de quienes nos rodean, como si nos estuviéramos deshaciendo de nuestras viejas vidas. Es un momento hermoso, confuso y doloroso a la vez.
Lo que está sucediendo en realidad es que nuestra alma se está despertando y está buscando desvelar quiénes somos en realidad. ¿Cómo podemos desentrañar nuestro yo auténtico sin desentrañar los aspectos de nosotros mismos que más nos disgustan? ¿Cómo podemos sanar aspectos de nosotros mismos sin antes reconocer las heridas?
Despertarse significa mirar todo dentro y alrededor de ti. Debes mirarte a ti mismo, a tu vida y a aquellos en tu vida. Tienes que mirar profundamente en las situaciones que aparecen ante ti. Aquí es cuando comienzan los seres sanadores y la transformación.
El Espíritu nos lleva a un viaje cuando descubrimos nuestro lado espiritual. No nos lleva por este camino para herirnos o dañarnos, sino para sanarnos y ayudarnos a volver a ser completos.
Debemos recordar que elevar nuestra vibración no significa simplemente vivir una vida positiva y pensar pensamientos felices. Tratar de pensar y actuar positivamente todo el tiempo requiere mucho trabajo si todavía estás destrozado por dentro. Debes regresar a tu ser auténtico para alinear tu vibración con la de una experiencia verdaderamente espiritual. Para volver a tu ser auténtico, debes sanar todas las heridas que no deseas ver.
El camino para volverse más espiritual es desordenado. Un lleno de baches Una llena de barricadas. Pero el viaje es hermoso y el paisaje es impresionante.



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